Los factores macro ambientales que afectan a la industria de la vestimenta

Los factores macro ambientales que afectan a la industria del vestido son los que se encuentran fuera de las pequeñas empresas y de sus competidores. Los dueños de negocios tienen menos control de estos factores externos, y su impacto al cambiarlos es mínimo. En su lugar, las pequeñas empresas deben adaptarse a estos factores macro ambientales, que son las características del consumidor, la tecnología, la influencia del gobierno y la economía. La forma en que las pequeñas empresas se adapten a estos factores determina tanto su capacidad para diferenciarse de sus competidores claves y su éxito en general.

Factores del consumidor

Los factores micro ambientales del consumidor son las culturas, las normas, los estilos de vida, la demografía y los cambios demográficos. Estos factores afectan a la industria de la confección de diferentes maneras. Por ejemplo, un fabricante de ropa de talla pequeña necesita crear estilos que atraigan a las diferentes culturas, especialmente si esos grupos culturales representan grandes segmentos de su mercado. Por el contrario, los fabricantes de ropa, mayoristas y minoristas evitan crear demasiadas prendas de vestir que queden fuera de las normas de la sociedad, como los estilos usados ​​hace 100 años. El envejecimiento de la población puede aumentar la demanda de pantalones vaqueros y calzoncillos de mayor talla, como los estilos relajados o más holgados. En general, muchas personas se vuelven más sedentarios cuando entran a los 40 y 50 años. Las cinturas de los consumidores se expanden por lo que necesitan tallas más grandes y más espacio para mayor comodidad. Además, la disminución de las tasas de natalidad en algunas áreas reducirá la demanda de ropa de bebé.

Factores tecnológicos

Los factores micro ambientales tecnológicos que afectan a la industria de la vestimenta son la disponibilidad de recursos, la demanda y la producción. Por ejemplo, la escasez de ciertos materiales, como el cuero, puede obligar a las empresas de ropa al por menor y al por mayor a vender más productos de cuero de imitación o sustituto. Los minoristas pueden aumentar los precios de la ropa de algodón si hay escasez de esta materia prima, ya que deben pagarle más a los fabricantes. La introducción de nuevos estilos de ropa de parte de un competidor puede desplazar la demanda de las modas viejas. Por lo tanto, un pequeño fabricante de ropa podría tener que suspender algunas líneas de ropa y producir otras nuevas que satisfagan las necesidades de los consumidores. Por otra parte, las compañías de ropa pueden agregar equipos más avanzados a sus plantas como robots, lo que podría obligar a las empresas a despedir a algunos trabajadores.

Factores legales y políticos

Las pequeñas empresas en la industria del vestido se ven afectadas por una serie de factores macro ambientales jurídicos y políticos. La industria ha sido repetidamente afectada por cuestiones como los derechos de los trabajadores y las leyes sobre el trabajo infantil. El Sindicato de Trabajadores de las plantas de fabricación de indumentaria puede organizar piquetes a sus empleadores, especialmente si sus salarios o beneficios médicos son menos favorables que los de otros trabajadores de la misma industria. Los piquetes de los trabajadores a sus empleadores impactan en la producción. Esto puede causar demoras para que los minoristas consigan los modelos de primavera u otoño a tiempo. Los activistas que no están empleados por las empresas minoristas también pueden realizar piquetes a quienes compran ropa de países conocidos por violar las leyes de trabajo infantil. Esta publicidad negativa podría afectar en las ventas y beneficios de los minoristas de ropa pequeñas. Además, un embargo comercial contra las importaciones de otra compañía obligaría a los mayoristas de ropa a encontrar diferentes proveedores.

Factores económicos

Los factores económicos pueden tener efectos tanto positivos como negativos en la industria del vestido. Durante los períodos de auge económico, las personas disponen de más ingresos. Por lo tanto, pueden comprar más ropa, aumentando las ventas de los fabricantes de ropa, mayoristas y minoristas. Sin embargo, las recesiones tienen el efecto contrario. Las ventas de las diversas prendas de vestir puede son significativamente inferiores. En consecuencia, los minoristas pueden haber quedado con grandes cantidades de inventario. Y es posible que tengan que vender la ropa a precios sustancialmente menores. Los fabricantes de ropa y los minoristas puede que también tengan que vender ropa de marca a bajo costo para competir con más marcas genéricas. Los consumidores a menudo compran marcas más baratas cuando tienen menos ingresos disponibles.