Habilidades de enfermería para una sala de urgencias

Los enfermeros de las salas de urgencia necesitan la misma licenciatura o grado asociado en enfermería que otros enfermeros registrados. También, tienen que pasar un examen de licencia estatal. Sin embargo, algunos de los conocimientos de enfermería requeridos en una sala de urgencias son muy distintos a los que necesitan aquellos que atienden pacientes en el consultorio de un médico o en una clínica.

Habilidades de comunicación

Los enfermeros de las salas de urgencias necesitan una fuerte combinación de habilidades de escucha y comunicación verbal, ya que se enfrentan a situaciones de vida o muerte. Ellos reciben a los pacientes cuando entran en la sala de emergencias o urgencias y, a menudo, necesitan averiguar sobre los signos vitales y otros detalles que conocen los paramédicos. Además, deben evaluar rápidamente las necesidades del paciente, y luego decidir dónde llevarlo y qué tipo de atención inicial necesita. También, al ayudar a los médicos en una sala de urgencias o un quirófano, el enfermero debe escuchar y seguir las instrucciones cuidadósamente.

Rapidez

Una diferencia importante entre la enfermería de la sala de urgencias y otros entornos de trabajo es el ritmo. En situaciones de urgencia, las enfermeras de este campo a menudo tienen que tomar decisiones rápidas, basándose en el instinto y el pensamiento crítico. Tienen que seguir de cerca a los pacientes y considerar los efectos de sus signos vitales. También, deben documentar con exactitud los síntomas y cualquier cambio en su condición. Adherirse a las directrices de un tratamiento también es importante para ayudar a mantener un ambiente sanitario en la sala de urgencias y evitar la transmisión de enfermedades de los pacientes.

Habilidades para tomar decisiones

Los enfermeros de la sala de urgencias suelen asumir más autoridad que los que se desempeñan en entornos de oficina. Esto es especialmente cierto en una situación de urgencia donde se presentan múltiples casos al mismo tiempo. A veces, los médicos no están fácilmente disponibles para hacer evaluaciones a los pacientes y proporcionarles atención de urgencia. En ocasiones, los enfermeros de la sala de urgencias gestionan el tratamiento de los casos menos urgentes, mientras que los médicos atienden las situaciones más complejas. Estos profesionales pueden vendar a un paciente o coser una herida, por ejemplo. Desde una perspectiva de liderazgo, también deben ser capaces de delegar tareas a los auxiliares de enfermería y demás personal según sea necesario.

Flexibilidad

Las condiciones de trabajo en un sala de urgencias suelen ser más variables que en el consultorio de un médico. Los casos son más graves y las situaciones, más dinámicas. Los enfermeros deben ser capaces de pensar fríamente y tomar decisiones en los casos en los que no están familiarizados con los síntomas del paciente. Tienen que ser ingeniosos para encontrar al médico o los suministros adecuados. Además, deben hacer frente a los pacientes que están traumatizados, borrachos, drogados, que muestran agresividad o sufren de enfermedades mentales.