Ventajas y desventajas de una organización vertical y horizontal

Las empresas han operado tradicionalmente con una estructura jerárquica descendente conocida como organización vertical. Una alternativa es implementar una estructura organizativa horizontal que consista en varias capas de gestión y una mayor confianza en el uso de equipos multifuncionales. Ambos tipos de estructura organizativa ofrecen una serie de ventajas, así como posibles desventajas.

Identificación de la organización vertical

Por lo general, una organización vertical consiste en un presidente o director general en la parte superior y una serie de vicepresidentes que supervisan áreas funcionales específicas tales como comercialización, finanzas y manufactura. A medida que desciendes por la cadena en cada área funcional, el nivel de autoridad y responsabilidad disminuye.

Ventajas de las verticales

Las organizaciones verticales proporcionan líneas claras de autoridad y un envergadura estricta de control, lo que puede conducir a la alta eficiencia de operación. En general, la organización está compuesta por departamentos relativamente pequeños, lo que permite que los administradores supervisen de cerca y controlen las actividades de sus subordinados. Cada capa de la organización informa al que está directamente encima de él, recorriendo todo la cadena hasta la alta dirección, y cada capa tiene sus propias funciones y responsabilidades claramente definidas. Los empleados que buscan progresar dentro de la organización también tienen un bien definido "escala laboral", donde cada nivel de la organización representa otro peldaño que el empleado intenta alcanzar.

Desventajas de las verticales

Los empleados en la parte inferior de una estructura vertical puede sentirse menos valorados que aquellos en las posiciones más altas de la cadena. Puede que algunos empleados no disfruten de la cultura complementaria de la política, que hace mucho hincapié ​​en complacer al jefe. También puede tomar una gran cantidad de tiempo para que las decisiones de la alta dirección se filtren a través de las múltiples capas, reduciendo la capacidad de la organización para reaccionar rápidamente a un clima de negocios que cambia rápidamente. Debido al control centralizado del poder, el liderazgo débil en la parte superior puede perjudicar la eficacia de toda la organización.

Identificación de la organización horizontal

La estructura horizontal difiere de la vertical en que hay menos capas estructurales. Cada departamento consta de varias áreas laterales funcionales supervisadas ​​por un individuo conocido como gerente de producto o líder del proceso que informa a la alta dirección. Por ejemplo, el departamento de desarrollo de productos puede consistir en las zonas laterales funcionales de análisis de mercado, investigación, planificación de productos y pruebas de productos. El gerente de productos es el responsable del resultado final.

Ventajas de las horizontales

Los empleados pueden lograr una mayor satisfacción en una estructura horizontal debido a su mayor libertad y autonomía. El uso de equipos de función transversal también puede conducir a altos niveles de cooperación en toda la organización. El fuerte énfasis en la innovación puede llevar a ideas que mantengan a la organización por delante de la competencia. La ausencia de múltiples capas estructurales proporciona una comunicación y procesos de presentación de informes más fluidos, haciendo que la organización sea más ágil y adaptable a los cambios.

Desventajas de las horizontales

La estructura descentralizada puede conducir a un "barco suelto", ya que los equipos y los líderes de proyecto tiene un alto nivel de responsabilidad en el logro de resultados, pero poca autoridad real sobre los miembros de su equipo. La falta de control resultante puede conducir a señalar con el dedo cuando las cosas salen mal, lo que puede obstaculizar la productividad, de acuerdo con el sitio web Practical Management. Las organizaciones que intentan convertir una estructura vertical a una horizontal pueden enfrentar desafíos, ya que la gestión tiene que adaptarse a una relación menos autoritaria y más grupal con sus subordinados.