El modelo de tres etapas del liderazgo efectivo

En 1988, los profesores de gestión Linda Neider y Chester Schriesheim introdujeron una herramienta para ayudar a los gerentes a entender el proceso de liderazgo. Esta herramienta describe el modelo de efectividad de liderazgo en tres etapas. La primera tapa involucra analizar los empleos, seleccionar empleados y proporcionar entrenamiento de orientación. La segunda etapa involucra establecer caminos de carrera, definir metas y proporcionar recompensas. La tercera etapa incluye evaluar y monitorear el desempeño. Al mantener un ambiente óptimo, los líderes logran resultados más consistentes de sus subordinados, tanto a corto como a largo plazo.

Condiciones precursoras

Los líderes exitosos aseguran que existan condiciones precursoras para establecer un liderazgo efectivo. Esto involucra comunicarse de forma efectiva con los subordinados. Los líderes efectivos definen los papeles y responsabilidades asociados con los empleos, seleccionan recursos con las habilidades y conocimientos adecuados y proporcionan entrenamiento apropiado sobre las políticas y procedimientos. Los líderes efectivos establecen expectativas claras. Cuando los empleados saben qué es lo que se espera de ellos, tienden a responder de forma positiva a los líderes directivos. Esto permite a los líderes lograr sus metas estratégicas.

Funciones de mantenimiento

La segunda etapa del modelo involucra apoyar y desarrollar a los empleados en una base continua. Al ayudar a los subordinados a definir las metas de carrera, adquirir habilidades y conocimiento y desarrollarse profesionalmente, los líderes efectivos mejoran la moral de los empleados, la satisfacción de empleo y la retención. Los líderes exitosos reconocen que el trabajo se hace a través de empleados comprometidos. Los líderes que inspiran proporcionan una visión atractiva del futuro y persona los empleados a mejorar constantemente los procesos y procedimientos para producir productos y servicios de calidad.

Reevaluación y monitoreo

Durante la tercera etapa, los líderes efectivos reevalúan sus presunciones y proporcionan retroalimentación a los subordinados sobre su desempeño. A través de los sistemas de monitoreo comprensivos, los líderes validan si los empleados producen servicios y productos que ayudan a la compañía a cumplir sus objetivos estratégicos. Por ejemplo, un líder puede dirigir a sus subordinados para enviar reportes de estado semanalmente que proporcionan detalles sobre la efectividad operativa. Al definir los indicadores de desempeño clave, como las ventas completadas, la tasa de satisfacción del cliente o los errores en productos, un líder efectivo rastrea su negocio y visualizar las tendencias. Después puede actuar de forma decisiva para manejar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas.

Consideraciones

Desarrollar habilidades de liderazgo efectivas involucra mejorar las habilidades de comunicación, tales como escuchar, hablar, presentar y escribir. Los programas de entrenamiento de liderazgo preparan a los participantes para evaluar una situación a través de la observación, experiencia pasada y considerar alternativas. Tomar buenas decisiones frecuentemente incluye solicitar opinión de los compañeros, subordinados, superiores y socios de negocios. Aprender cómo colaborar permite un liderazgo exitoso. Con un entendimiento completo de este modelo de tres etapas del liderazgo efectivo, puedes establecer una base fuerte que te permita construir un equipo de empleados leales y comprometidos.