Diferencia entre estrategias y conceptos de campañas publicitarias

Cuando las empresas buscan construir sus negocios y conseguir que los clientes acudan a sus puertas, muchas de ellas optan por poner en marcha una campaña publicitaria. Se trata de un programa importante e integral que cubre todas las facetas del proceso publicitario, desde la creación de los anuncios hasta su difusión. Ambos conceptos y estrategias constituyen una campaña de publicidad completa, pero estos dos componentes publicitarios no son intercambiables. Más bien, son distintos y ambos tienen una función específica en el proceso de la publicidad en su conjunto.

Mensaje general

El concepto de campaña publicitaria es el mensaje general de la campaña en su conjunto. Por ejemplo, si un anunciante busca vender alimentos para bebés, puede seleccionar un concepto que se centre en el hecho de que la comida es totalmente natural presentando bebés en campos de flores silvestres o sentados entre frutas y verduras. Después de decidir sobre el concepto, el anunciante está listo para disponer cómo va a poner este concepto en uso y desarrollar sus estrategias.

Métodos

Las estrategias publicitarias son los métodos que los anunciantes utilizan para convencer a los compradores de que compren sus productos. Si bien se relacionan con el concepto, son distintos. A menudo, los anunciantes utilizarán estrategias de persuasión probadas en el tiempo en su publicidad. Por ejemplo, pueden adoptar una estrategia de moda y tratar de mostrar a los compradores que todo el mundo está comprando el producto anunciado y, como resultado, el espectador también debe hacerlo.

Orden de selecciones

Si bien no hay un método establecido para el desarrollo de una campaña de publicidad, en general los anunciantes primero seleccionan un concepto de campaña, luego dejan que este concepto informe al resto del proceso de creación del anuncio. Partiendo de este concepto, el anunciante puede crear una base sólida sobre la cual construir el resto de su campaña publicitaria. También, debido a que el concepto es el tema general de la campaña en su conjunto, a menudo sólo tiene sentido seleccionar este elemento primero.

Cambios en la campaña

Debido a que las estrategias y los conceptos de la campaña no están necesariamente vinculados entre sí, puedes cambiar uno sin cambiar el otro. Por ejemplo, si el anunciante decide que su concepto inicial necesita ser renovado, puede adoptar un concepto nuevo sin cambiar las estrategias que está empleando. Del mismo modo, si el anunciante decide que sus estrategias no son tan efectivas como esperaba que fuesen, puede seleccionar nuevas estrategias mientras mantiene su concepto central en marcha.