La importancia de las matemática básicas en los negocios

Tener un negocio requiere más habilidad en la creación de un producto o talento al prestar un servicio. Supervisar las finanzas de tu empresa es clave para la supervivencia y el éxito. Entender matemáticas básicas de negocios es necesario para las operaciones rentables y el mantenimiento de registros exactos. Saber sumar, restar, multiplicar, dividir, redondear, utilizar porcentajes y fracciones es lo mínimo que necesitas para poner precio a tus productos y cumplir con tu presupuesto. Si las matemáticas no son tu fuerte, asóciate con alguien que pueda hacerse cargo de esa función o contrata a un empleado de confianza para ayudar a que tu operación permanezca en números negros y crezca de manera responsable.

Calcular costos de producción

Antes de formalizar tu negocio, debes estimar el costo de fabricación o de adquirir el producto o de realizar el servicio. Añadir todos los gastos asociados con la fabricación o compra de artículos te ayudará a darte cuenta de si puedes ser competitivo con otras compañías y lo suficientemente rentable para mantener tu negocio y hacer un ingreso razonable. Además de los costos estándar de producción, como los materiales y maquinaria, añade los gastos extras, como transporte, mano de obra, intereses sobre la deuda, almacenamiento y comercialización. La base de tu plan de negocio es una representación exacta de cuánto vas a gastar en cada elemento.

Determina los precios

Para asegurarte de que puedes operar tu negocio y generar suficiente flujo de efectivo para invertir en tu empresa, debes cobrar lo suficiente para que tu producto sea rentable. El margen de beneficio es la diferencia entre el costo de la mercancía y el precio de venta, que te da la utilidad bruta. Si las operaciones requieren un gran margen de beneficio, como el 70 por ciento, es posible que no sean competitivas si otras compañías venden los mismos artículos por menos. Una vez que hayas determinado el margen de beneficio, una forma de calcular el precio de venta es dividir mediante porcentajes o decimales. Por ejemplo, si un producto cuesta US$10 para producirse y su margen de beneficio es 35 por ciento, resta 0,35 de 1 (o 100 por ciento), que te da 0,65, lo que es 65 por ciento. Para calcular el precio de tu producto, divide 10 entre 0,65, que se redondea a US$15,38.

Beneficios de medida

Si quieres determinar el beneficio neto durante un cierto período de tiempo, tendrás que restar devoluciones, costos de producir un artículo y los gastos de operación de la cantidad total de las ventas o ingresos brutos, durante ese tiempo. Los descuentos en productos, la depreciación de equipos y los impuestos también deben ser calculados y se restan de los ingresos. Para llegar a la ganancia neta, añade cualquier interés que ganaste del crédito concedido a los clientes, lo que se refleja como un porcentaje de la cantidad que cada persona debe. El beneficio neto ayuda a entender si cobras lo suficiente por tu producto y si vendes un volumen adecuado para continuar operando tu negocio o incluso ampliarlo.

Analiza las finanzas

Para analizar la salud financiera de tu negocio, tendrás que proyectar los ingresos y gastos para el futuro del proyecto. Es importante entender el impacto de tus registros contables cuando cambias un número para reflejar un aumento o una disminución en las ventas futuras. Estimar cómo afecta un empleado afecta los ingresos indicará si puedes darte el lujo de añadir personal y si los beneficios obtenidos valdrán la pena por el gasto. Si un competidor empieza a vender un producto más barato, puede que tengas que calcular la cantidad en la que el volumen debe aumentar si se reducen los precios. Puedes necesitar saber si puedes darte el lujo de ampliar tus operaciones para mejorar las ventas. Utilizar las matemáticas financieras básicas para entender cómo este tipo de acciones afectan tus finanzas en general es imprescindible antes de llevar tu negocio al siguiente nivel.